Exposiciones

"Detalles y más"


Esperanza de la Rubia, artista vecina de Navalcarnero, ha expuesto en diferentes municipios de la sierra de Madrid. Ahora la pintora, se da cita en la sala "Antoñete" de la plaza de toros de Las Ventas, con la colaboración del Centro de Asuntos Taurinos de la Comunidad de Madrid. La exposición "Detalles y más", con la que nos deleita en este caso, está compuesta por una veintena de obras elaboradas con técnica óleo sobre lienzo. 

Gusto, destreza, paciencia, virtuosismo, detalles y más, diría yo más bien. Sobre las paredes blancas de la sala "Antoñete" se abrían ventanas a otras realidades. Esa fue mi primera sensación al entrar. Un mundo más allá del lugar en sí, se hacía paso a través  de cada marco, en cada lienzo. La profundidad de las pinturas me atrapaba y sumergía en ellas. Sentí la tentación de asomarme a aquellas "ventanas" para ver más de esa otra realidad, esa tauromaquia a todo color que representa Esperanza de la Rubia es sus obras. En ellas, el juego de luces y sombras conduce estratégicamente la mirada del observador a lo largo del lienzo. Con este efecto la autora consigue trasmitirnos en cada caso la emoción del instante. Una pintura minuciosa y perfeccionista que deja paso a la imaginación del espectador, a pesar del realismo, ya que no representa "escenas" al completo si no momentos, elementos, detalles como bien dice el titulo de la exposición. Los pequeños detalles que singularizan y hacen único el ritual de la tauromaquia.




CÉZANNE site/non-site

La obra de Paul Cézanne (1839-1906), había sido mal interpretada por los cubistas que la reducían a un juego de formas casi abstractas. En 1969, el  artista Robert Smithson propone una nueva interpretación de la misma, de esta, el titulo de la exposición site/non-site. Se trata de dos conceptos que aluden al trabajo al aire libre y en el estudio, es decir, paisaje o naturaleza muerta.
En la obra de Cézanne predomina la práctica de la pintura al aire libre, aunque no es exclusiva, ya que terminó por dar mucha importancia al trabajo en el taller, llegando así a mezclar elementos paisajísticos en sus bodegones y viceversa. 

Es complicado explicar lo que suscita su obra, lo que mueve. Son sensaciones contradictorias ya que la alegría de la paleta de Cézanne (colores vivos, azules, verdes, naranjas...) se ve constreñida por la estructura y composición de los elementos e incluso paisajes. Pintó en cuantiosas ocasiones "la curva en el camino", pero estas escenas al aire libre, parecen empaquetadas, como encerradas en una habitación. Es como si el artista se hubiese sentido siempre limitado por algo o a algo. Hay cierta agonía y soledad en sus obras, quizá ese sentimiento hacía que terminase sus paisajes en el lienzo, como si de una composición en el taller se tratara.
Por el contrario, sus creaciones en el taller dejan de ser exclusivamente naturaleza muerta, cuando va más allá, representando la amplitud, por ejemplo de una montaña, con los tejidos y las sombras. Aún así, diría que siempre hay cierta aflicción. Elementos aislados que protagonizan cuadros, otros que parecen fuera de lugar... Creo que si muchas de sus obras las dividiésemos en partes, nos costaría unirlas como en un puzzle.

Es posible que Paul Cézanne se sintiera así toda su vida, como fuera de lugar, quizá jamás encontró su sitio, quizá, vivió como sus obras, "enmarcado"... O quien sabe, todo lo contrario. Se sentía tan libre, tan mimetizado con la naturaleza que jamás diferenció entre fuera y dentro, site/non-site, vivo o muerto.
Fue un hombre solitario, un artista incomprendido, dijeron que su pintura fue "un alto al fuego" en la disputa entre forma y color, el principio de algo nuevo que ni siquiera tenía nombre. Así contesto el a esas escasas alabanzas:

"No se sustituye  el pasado, sino que solo añadimos otro eslabón a la cadena y que el éxito solo llega por medio del trabajo".






  
MUSEO Thyssen - Bornemisza


PICASSO en el taller

En el taller reúne más de ochenta pinturas, cerca de setenta dibujos y grabados, varias piezas de cerámica del artista y una treintena fotografías de otros autores, que permiten apreciar como el taller de Picasso se convierte en el centro sobre el que gravita toda su creación"
 En esta obra "El Taller", el artista sumerge al espectador en su lugar de trabajo y en su vida hasta el punto de llegar a sentir que no vivía y creaba, sino al revés, el arte era el que movía los hilos de su vida. Hizo de sus instrumentos de trabajo, las paletas, los pinceles, los lienzos, el lugar... parte de si mismo. En ocasiones, da la sensación que los elementos son prolongaciones del propio artista. Los talleres son "sus paisajes interiores", -así lo definía el-, y estos marcan su obra en todo el recorrido.

El artista, no separó jamás  -aparentemente- su vida privada de su vida, de su obra, de su arte. Sus amores, sus parejas, la pasión por ellas, sus debilidades y el desvanecer de todo aquello se ve reflejado en muchos de sus trabajos. Picasso dejó marcadas con fecha e incluso hora todas sus obras ya que el, que intuía de su importancia e influencia a lo largo de la historia, vino a decir más o menos, que es imposible saber que quería expresar el autor de una obra sin saber la situación por la que atravesaba, no solo el, la humanidad, en el momento de crearla...

...Cómo podríamos sino valorar la faena de un torero sin saber como era el toro, el entorno, la época o las circunstancias? Como podríamos valorar a ese mismo toro sin saber quien lo toreaba?

                              


   
                             

                       Fundación Mapfre Madrid

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