Con mucha ilusión y por
primera vez en este pequeño espacio dentro del gran universo de las redes, puedo
decirles a tod@s ustedes… bienvenidos a mi blog!!!
Dios!! Como me ha costado
escribir esa primera frase. Algo tan obvio, con un mensaje tan claro y un
objetivo tan simple a priori, pues no me salía ni cogiendo impulso. De pronto
un sentido de la responsabilidad se ha apoderado de mí, en teatro lo llamamos
“enfrentarnos a la hoja en blanco”, pero creo que en este caso, más bien ha
sido una especie de miedo escénico <Sales al escenario, aparentemente estas solo,
no ves a nadie pero sabes, que cada palabra o gesto que articules a partir de
ese momento va ser recibido de alguna manera por aquellos que te están
observando, los espectadores, ustedes en este caso> Que me dicen de esa
sensación al entrar por ejemplo en un salón de actos o en un restaurante. Se te
ha hecho tarde pensando que ibas a ponerte para la ocasión y cuando llegas, ya
todos están sentados y te miran, mucho. Tienes miedo a “dar un paso en falso” y
que de ahí en adelante todos te recuerden por ese desafortunado incidente… A
partir de ese momento, no importa si das
el discurso más elaborado de la velada, si eres capaz de contestar preguntas en
4 idiomas, si cuentas que tienes dos carrearas y tres masters, si enseñas las
fotos de tu última maratón de 42km completada o si te bebes dos botellas de
vino tu sola, no, eso ya no importa porque tu seguirás siendo la que tropezó
con la moqueta… En fin, que no sabía cómo dar comienzo a esta, mi primera
publicación y de alguna manera “bienvenida” y ya he dado el gran paso!!
Necesidad, podría decir
que ese es el motivo. O lo que es lo mismo, un impulso irrefrenable, esa
zozobra que algunas personas tenemos por defecto y que nos hace andar por la
vida cargados de inquietudes y deseo de expresarnos ya puede ser a brochazos,
con piruetas, palabras, a capotazos, con partituras o a gritos. Creo que de esa
necesidad de “materializar” emociones y transmitir experiencias nace este
espacio, mi pequeña Platea. Con su permiso, voy a
tutearles. Me encantaría ser capaz de trasladaros por un momento a esas tardes
de toros que quedaran para siempre en mi memoria y si lo consigo, quizá en la
de algunos vosotros, aquellas que marcarán un antes y un después para ciertos y esas otras que no pasó “nada” pero al salir
de la plaza me topé con aquella estampa, que en fin, como dicen, valía más que
mil palabras. Probablemente, este no sea el clásico blog de toros, no voy
hablar exclusivamente de toreo y posiblemente mis publicaciones puedan llegar a ser muy dispares. Como
dispares son esas tardes de festejo, las puestas de sol, las noches de cante,
los almuerzos y los ayunos, la pintura de Dalí o de Sorolla, los vestidos de
las “guapas”, el temple y la prisa, que se pare el tiempo o que Morante lo
detenga, la razón y las melodías del corazón, ver toros en Madrid, en Nimes, o en
Colombia.
Me gustaría regalaros un poquito
de mí, o más bien, de todo eso que me ofrece la vida, las circunstancias, las
personas… Y si no me lo ofrecen, ya me encargaré yo de perseguirlo y
conseguirlo como sea. Gracias de antemano por confiarme un poquito de su
tiempo, disfruten!!!